Al entrar a discutir el tema de la inclusión de las
Tecnologías de la Información y la Comunicación, TICs, en los currículos
actuales de la escuela primaria y secundaria, la mayoría de maestros
colombianos expresan una inquietud similar: ¿por dónde empezar? Puesto
que para el tema de las TICs y su sinergia con la educación no se han
encontrado aún fórmulas mágicas que estructuren un procedimiento
ordenado y metódico, y en cambio sí se ha dejado claro que se trata de
un proceso de "cocción lenta", en el que la observación y la
retroalimentación de experiencias cumplen un papel fundamental, Eleducador
aprovechó la presencia en el país de la experta en el tema de
tecnología educativa, Beatriz Fainholc, para conversar con ella acerca
del panorama de las TICs en la educación actual y escuchar sobre su
proyecto Enciclopedia sobre Tecnología Apropiada y Crítica y los cursos
de formación para profesores en Tecnología Educativa.
¿Qué es la tecnología educativa?
Definimos
a la Tecnología Educativa como la organización integrada de personas,
significados, conceptualizaciones, procedimientos, artefactos simples
y/o equipos complejos electronificados, pertinentemente adaptados a ser
utilizados para la elaboración, implementación y evaluación de programas
y materiales educativos, como procesos y productos que tienden a la
promoción del aprendizaje contextuado de un modo libre y creador. Se
trata de una Tecnología Educativa Apropiada -T.E.A.- que se diferencia y
supera de la Tecnología Educativa Convencional de racionalidad
instrumental existente desde la década de 1960 en adelante". En "Contribución de una tecnología educativa crítica para la educación intercultural de la ciudadanía. Por: Beatriz Fainholc
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¿Cómo ve el proceso de alfabetización digital en América Latina?
BF. Estamos un poco aletargados,
estamos demorados. Estamos demorados porque se cree que hay que usar
todo, ahora y ya, y eso denota una falta de formación en lo que es el
conocimiento de cada cosa, para qué usar cada cosa; por ejemplo, no te
vas a poner para una fiesta todas las plumas, los moños y todos los
adornos, tienes que seleccionar. Yo tengo hace cinco años mi cátedra
montada en internet en open source (fuente abierta), porque
ideológicamente creo que al menos para estos países debería ser así,
todo en fuente abierta, con alta participación, la web 2.0. En CEDIPROE,
que es el Centro de Diseño, Producción y Evaluación-Investigación de
Recursos Multimediales para el Aprendizaje, del cual soy directora
general, hemos hecho importantes avances y hemos hecho capacitación para
formar al profesor en tecnología educativa. Nuestro curso forma al
profesor en tecnología educativa, y rapidito, sin que se asusten, se les
dan herramientas concretas, unas pocas, para sentar las bases de este
conocimiento, para que después ellos sigan el proceso. De manera que
esto les permita crear un proyecto de tecnología educativa, incorporando
las TICs, para su labor docente, con fuerte presencia de grupos
colaborativos. Luego de eso sólo queda la práctica y algunos principios
fundamentales de evaluación. Yo conozco bastante el movimiento educativo
de Colombia y creo que están preparados para llegar a manejar bien este
tema.
¿Por dónde empezar la profesionalización del docente hacia la tecnología educativa?
BF. Lo primero es formular un proyecto
de tecnología educativa, ya sea a nivel escuela o a nivel gobierno, para
que la gente sepa lo que es esto, este campo que hoy en día explotó.
Hay que empezar por desmontar la creencia de que sólo el uso de los
medios en el aula es tecnología educativa, esto no es cierto, a pesar de
los ingenieros y los analistas, que son los que presionan para la venta
de equipos, artefactos y demás. Ellos también ya se dieron cuenta de
que si la gente no tiene educación al respecto, no van a poder
aprovechar los aparatos como tal. De manera que existe un divorcio
grande entre la capacitación operaria y la educación para la tecnología.
Por otro lado está el tema de las mediaciones, que es el tema donde el
diseñador didáctico, el profesor, tiene que ponerse a pensar cómo va a
mediar su mensaje y en el marco de qué entorno, de qué contexto, para
qué lo va a hacer; esta planeación y concienciación acerca del recurso
es lo principal.
¿Cuál es la diferencia entre saber manejar los soportes y aplicar un proyecto de tecnología educativa?
BF. Las máquinas están
afuera, alrededor, y el proyecto está en la cabeza. Entonces en la mente
está la fortaleza del proyecto, en la voluntad, en la acción, en la
decisión. No está en los equipos. Los equipos son el 5% de la cuestión.
¿Cuál es la actitud de los educadores hacia las TICs?
BF.
Primero la gente huye despavorida. Algunos dicen "bueno, si no me queda
más remedio, díganme rapidito lo que tengo que hacer"; otros dicen "sí,
sí", pero cuando llegan al salón cierran la puerta y siguen haciendo lo
mismo, van a los cursos y a los seminarios pero no los aplican; o
incluso usan los equipos, pero para hacer lo mismo. Entonces no hay una
revisión ni una optimización de para lo que sirven los aparatos, que
sirven para unas cosas pero para otras no sirven, porque afortunadamente
no son panaceas, porque si no seríamos todos robots.
¿Cuáles son los grandes retos de los docentes actuales ante la enseñanza de y a través de las TICs?
BF.
Estar abiertos, estar en la recepción continua como personas. Esta es
una sociedad de alta presión, de alto cambio, de mucha confusión,
entonces tienen que tener la mira muy clara, estar abiertos a la
reflexión, a la contrastación del terreno.
¿Cuáles
son las competencias que se están desarrollando en las nuevas
generaciones a partir del cambio sociotecnológico que vivimos?
BF.
Es otro perfil el que se está formando, que no es ni mejor ni peor,
sino acorde a los tiempos que nos han tocado. Eso tiene pros y tiene
contras, en base al proyecto, que es bastante alienado, bastante líquido
y confuso, según mi opinión. Por eso hay que tener la mira abierta para
poder contrastar el terreno. Las competencias que se están formando son
sociotecnológicas y eso me da espacio para la colaboración, pero más
que para la colaboración primero para el reconocimiento del otro, que es
una persona diferente, donde no necesariamente existe un pensamiento
único de por medio, ni el otro tiene que apegarse a lo que yo pienso.
Toda nuestra sociedad es veladamente muy impositora, hay mucha libertad
entre comillas, pero veladamente es muy impositora; las máquinas mismas,
los medios de comunicación social son impositores, dirigistas,
direccionados.
Entonces primero reconocer la diversidad del
otro, después viene el tema de la colaboración, porque eso se aprende,
eso también hay que enseñarlo y toma tiempo. No sé si en Colombia haya
políticas que quieren ponerse metas a largo plazo a este respecto, como
deben ser todos los proyectos educativos, porque los cambios educativos
son demorados. Uno quiere cambiar pero al mismo tiempo no quiere
cambiar, y después cambia un poquito pero después retrocede, todo esto
es cuestión de tiempo, de reflexión y es un proceso muy conflictivo
porque somos personas.
Las competencias son sociotecnológicas
por lo que implican al socio, que es el otro, pero también son
socioemocionales; son también sociocognitivas, porque el conocimiento se
hace porque está el otro: tú me haces preguntas que me hacen
reflexionar y lo que yo te digo te debe hacer disparar otras cosas,
somos dos, imagínate si estoy en frente de 200; y metacognitivas por el
tema de la reflexión.
¿Háblenos acerca del proyecto de la Hipermedia Batea?
BF. Es una hipermedia, una enciclopedia
sobre tecnología apropiada y crítica, que consta de 5 capítulos: 1.
Formulación de proyectos de tecnología educativa, 2. Enseñanza, 3.
Aprendizaje, 4. Comunicación y 5. Tecnologías de la Información y la
Comunicación, TIC's. Hoy en día se encuentra en su tercera versión.
Nosotros
hicimos el primer hipertexto en Argentina, que fue presentado en
Inglaterra en 1993, y que funcionaba en un Windows 3.11. La pretensión
del proyecto era abordar de una manera sociocognitiva e interactiva
aquellos conceptos claves que un profesor de tecnología educativa tiene
que tener bien claros. Entonces se trabajó mucho en la investigación
previa para armar las redes conceptuales, las redes semánticas, la
selección de las imágenes, la dramaturgia de la música, es como una
Encarta.
Esto luego se amplió de una manera tal que se convirtió
en un CD-Rom, que para aquel entonces no tenía conectividad, luego
hicimos otros ya con conectividad. Cuando en 1995 llega el boom
de la internet, esto nos hizo pensar que la gente debe vivir aquello
que está aprendiendo, si no lo vive se queda como algo exterior;
entonces inventamos este curso de calificación profesional para el
profesor de tecnología educativa. El curso es una multimedia también, en
el sentido que tiene manuales que mandamos por pdf,
interactivos de ejercicios que están en la web o si no se los damos acá y
nos los pueden mandar por correo. Todo esto como para que el
aprendizaje se pueda adaptar a las mil y una posibilidades de estos
medios y no quedarse pegado al tema de internet , porque hay gente que
todavía no tiene acceso a la red.
De esta enciclopedia hay un
demo en la web y ahí se muestran los 5 capítulos importantes. Ahora
tenemos ganas de publicar el diccionario de tecnología educativa en
papel, que por ahora se está revisando.
Este proyecto de la
hipermedia se implementó primero en pequeña escala, luego en mediana
escala y luego en una gran escala pero no masiva, es decir no salió del
Ministerio de Educación, y no tuvo una confrontación tipo estudio
experimental. Los resultados a partir de la investigación acción son
buenos. Hay muchos que siguen teniendo miedo, que se pierden, porque no
logran contener este tema de la ansiedad frente al bombardeo de
información como pasa en internet. Es tanto lo que hay que uno se
desespera, y si no controlas esto internamente te llega a desorganizar.
Pero en promedio los resultados han sido buenos.
¿Cómo motivar a los maestros para que inicien la formación de los estudiantes en el buen uso de estas tecnologías?
BF. Yo hablo de un uso inteligente, un uso inteligente
pertinente, un uso útil. Cuando se ve que eso le sirve, que es útil,
entonces la gente lo sigue usando; pero cuando no está muy claro para
qué lo usa, por qué lo usa, para qué es esto, y se preguntan ¿es más de
lo mismo? ¿Cuál es el valor que añade? ¿Cuál es la diferencia que
aporta? Si eso no está muy claro entonces empiezan a cuestionar
¿entonces para qué? ¿Para gastar más? ¿Para perder el tiempo? Porque
esto es un esfuerzo para el maestro. De manera que se debe empezar por
responderle estas cuestiones a los maestros para que ellos entonces
puedan motivar y guiar a sus estudiantes.
¿Cómo va a afectar el internet la disciplina de la investigación y su enseñanza en la escuela media?
BF. Primero Colombia ha tenido
excelentes investigadores, profesores universitarios excelentes.
Internet va a ayudar en la investigación, porque vas a tener ahí el
caudal de información, pero esa información hay que trabajarla, hay que
gerenciarla, hay que hacer muchas cosas. Puede que tengan conectividad,
pero eso no va a facilitar que ordenen su cabeza con un proyecto de
investigación, qué quieren, para qué. Es como planear un viaje, tienes
que saber si vas a ir en carro, en avión, hacer los cálculos de gastos,
de presupuesto, todo pasa por la planeación y eso internet sólo no te lo
va a dar. El problema no está en la fuente sino en la metodología.
Por
otro lado hay que enseñar lectura crítica en internet, sobre la
procedencia de la fuente, del autor y contrastarlo con la realidad. Lo
mismo pasa con los proyectos virtuales de educación que no tienen un
respaldo de ladrillos, que no existen realmente, que son volátiles, no
sabemos quiénes son, dónde están, cuál es la gente, la formación de las
personas, es un aventurerismo terrible, y así han estado pero no han
permanecido, luego resucitan y esto afecta la credibilidad y la
confianza.
Beatriz Fainholc.
Graduada
en Ciencias de la Educaciónpor la Facultad de Filosofía y Letras de la
Universidad de Buenos Aires. Doctora en Humanidades y Ciencias de la
Educación de la Universidad de La Plata, por su trabajo "La
interactividad en la educación a distancia". Actualmente se desempeña
como docente para diversos programas de posgrado, con su cátedra sobre
epistemología de la tecnología educativa. Directora general de la
Fundación CEDIPROE y autora de varios títulos sobre tecnología
educativa, entre ellos "Programas, profesores y estudiantes virtuales.
Una sociología de la educación a distancia", "La lectura crítica en
internet: análisis y utilización de los recursos tecnológicos en
educación", "El profesor ante las nuevas tecnologías: aportes de
Tecnología Educativa Apropiada", entre otros.